Espacio donde divulgo mis ideas, sean las que sean. Esa es la naturaleza de lo cotiano

viernes, 28 de agosto de 2009

Mas haya del morbo del hentai

Hasta hace unas semanas mi vicio creo inocuo por consumir manga, me llevo a entrar en distintos blogs, donde pude ir comprobando algo que ya desde años ocupo un lugar en mi mente, me causaba un cierto interés el entender el hentai, termino que puede englobar muchas clasificaciones como generalidades, que comúnmente se relaciona con el manga o anime japonés pornográfico explicito o implícito.
Me parece que no estoy completamente documentado para analizar esos fenómenos – con suma cientificidad-, desde el principio que no es solo analizar un “dibujito mañoso”, sino que involucra ya no creo solo en Japón sino en todo el mundo un amplio abanico de fantasías, historias o gustos que plagan la mentes adultas. En ese sentido de mi limitado bagaje para un análisis mas completo, pues se me despertó el interés al percibir como en todo ámbito de la pornografía, que en el hentai el aspecto pedófilo es algo muy amplio, porque le consigno un aspecto pues no solo es la imagen o la historia que relacione el acto sexual de una menor con un hombre adulto, sino que se juega mucho en otros géneros, con una fijación erótica con niñas, escolares que pareciera englobar a ambos sexos.
Pues me pareció interesante que actualmente las leyes y la policía luchan de manera fuerte contra la proliferación de ese material pedófilo pero no se hasta que punto no se ve a ese tipo de hentai como pedofilico; y a su vez también de que me pareciera que muchas personas ven esas escenas e historias como algo erótico, es pues ya hablar de eso entrar en la complejidad de analizar al lector o consumidor de este tipo de hentai, que podría ser esa persona que desea satisfacer su necesidad de consumir pornografía pedofilico real, tiene que entrar en el mundo de las historias caricaturizadas de historias de “lolis” o que también pues puede ser una persona que cae en una vorágine de gustos que se pueden ir adquiriendo al ver manga japonés, donde la constante de relaciones (adultos – niños) esta como una constante; pueden ser pues muchas razones las que lleven a consumir ese tipo de hentai como otros tipo de manga.
En ese sentido esos dos puntos que he nombrado me han causado interés, entre ellos el ultimo mucho mas, por ser el de los patrones uno de los que a mi parecer influyen mucho para que algunas personas lleguen completamente a volverse lectores de ese tipo de manga, pues la sobre exposición podría influenciar en el consumo persona, no quiero decir que el consumo de material con significancia pedófila influencia a todas las personas, pues hasta cierto punto pecaría al universalizar los preceptos de consumo, como los gustos; pero si remarco que el influjo de este material en amplia extensión si podría influenciar en mentes que hasta cierto punto lleguen a los limites de la moralidad, como de la legalidad, pues cabria pensar ya que ciertas personas incrementarían esos deseos y podrían trasladarse a un nivel mas haya del imaginativo – manga o anime – sino que podría ya volverse consumidor del material real, que puede o no influenciar en que cometa actos criminales.
En ese sentido continuo comentando el vacio informativo para que me permita comprender la cabida como el índice criminal de abuso sobre menores –primero en Japón- en el mundo, esto relacionándolo pues con criminales que empezaron a actuar mediante el consumo de material pedófilo, concretamente iniciándose en la pornografía grafica, creada por ciertos mangacas.

jueves, 6 de agosto de 2009

Descomponer la cultura.

“cultura” muchas palabras se dicen, muchos pensadores chocan al hablar de la cultura; que debería ser visto como cultura y que no, esa es un gran paradigma en la actualidad. Desde que las ciencias sociales democratizaron las acepciones como los espacios donde este concepto entra, muchas cosas han adquirido un carácter de cultura, mientras otros ven con perplejidad el llamar cultura a esas cosas como ideas que antes eran parte del montón de ideas o realidades fueras del ámbito cultural.
Siendo uno un antropólogo se ve inmerso aunque no le guste en esta temática, lejos del espacio donde hayamos estudiado, de la vertiente a la que nos identifiquemos; vemos pues la realidad – lo cotidiano como los extraordinario – como ambientes de la cultura, donde manifestaciones muy diversas se realizan, pero creo muy pocos se detienen en pensar esos hecho o actos como culturales. He aprendido no solo con los cursos, sino con la vivencia que la cultura también se somete a una constante humana que es: ser positiva como ser negativa. Que quiero decir con eso, pues si somos fríos, objetivos al 100 porciento – cosa algo difícil, no solo en ciencias sociales sino en la realidad misma del ser humano – podemos apreciar que conductas, pensamientos, ideas… pueden ser lindar siempre entre esta dualidad contradictoria, de que ciertos puntos subjetivos sean aceptables para unos como inaceptables para otros. Eso mismo le sucede a la cultura en esa constante de los positivo como lo negativo, ha habido como existen manifestaciones culturales que pueden ensalzar la violencia como otras que convergen en una naturaleza de mucha mas paz o equilibrio; pero creo ahí ese carácter de negatividad como de positividad no le quitaran esa esencia que es la cultura.
Porque ello, pues por definición – mirando que hay muchas definiciones – la cultura es un carácter humano, pudiendo llegar a decir que el hecho cultural nos da la cualidad humana de la que tanto hablamos, al generar ciencias, letras, tecnologías, espiritualidad, etc. Es pues esa naturaleza humana – hasta cierto punto artificial – al ser la cultura un hecho generado por ciertas colectividades que generan normas, ideas y pensamientos intersubjetivos; siendo así comprendido pues podemos llegar a apreciar que la cultura, como hecho fijo o concreto es muy diverso, que aunque se hable que en la época de la información las barreras sociales –hasta culturales – ya no existan, seguirán existiendo como de limitantes entre no solo tipos o manifestaciones de cultura, sino sobre todo de el nivel de susceptibilidades que los hechos culturales pueden causar en grupos humanos no adecuados a esas manifestaciones culturales. Esto pues si lo vemos desde una visión antropológica, que puede ser tildada de democrática, o ingenuidad académica, por otros intelectuales que viven fortaleciendo la idea de espacios únicos de la cultura, que vienen a ser el decálogo del cultivar de las letras antiguas, las artes, la ciencia – que son manifestaciones culturales ampliamente aceptadas, pero no las únicas – que a su visión son el único espacio de lo cultural, o de la “cultura oficial” que con ese carácter oficial se desliga de lo inculto o pagano/cotidiano, adquiriendo una jerarquía un nivel, que en su mayoría se fortalece en las ideas de un grupo una élite de personas adecuadas para discernir en lo que es y no es cultura; pues esa situación es algo que se da y creo se seguirá dando pues es en cierto punto parte es de nuestra naturaleza humana la existencia de castas o grupos de poder que pretendan legitimizaron su poder mediante un poder cultural.
La legitimización cultural no es solo algo que grupo de intelectuales quieran que tenga su noción de cultura, sino que también esos grupos tan heterogéneos, apelmazados en la idea de cultura popular, han ido generando maneras de legitimizar sus patrones culturales, ideas, sentimientos que ya en el transcurso de muchas décadas atrás han ido tomando forma no solo de colectivos sociales, de manifestaciones mas exaltada de su identidad, sus remembranzas, sino que ya han empezado a tomar parte de ese circuito que se llama “cultural” al estar mas constantes en obras de teatro, artes plásticas, gastronomía; me atrevería a decir ya no solamente como simples ejemplos o modelos de lo que es su cultura, sino como ya engendradores de ideas, personas que ven espacios y modulan sus manifestaciones culturales a los espacios en los que comienza a ingresar sus patrones culturales, como también ya se ve un consumo de esa industria cultural.
Terminando mis breves líneas, creo que nos espera ir redescubriendo mas lo que es la cultura, ver que en ciertos aspectos la cultura se mantendrá como también se ira transformando; todo dependiendo de los intereses, influencias a la que las personas; esas que hacen de la cultura, eso “cultura”.